Desde antes de abrir Villalegría he tenido una pasión que casi deriva en obsesión por el lino. Pienso que es el tejido más noble que existe y, cuanto más leo sobre esta fibra, más admiro los infinitos usos que los humanos hemos sido capaces de darle en la historia. Y no sólo como ropa de cama…
Para empezar, sabemos que se cultiva desde miles de años antes de Cristo, que es la primera fibra vegetal que se usó para confeccionar tejidos y que sigue utilizándose a día de hoy. Los primeros en documentar su cultivo fueron los habitantes del Antiguo Egipto. Y aunque su origen está en Oriente Medio, se ha extendido por todo el mundo.
La semilla del lino se usaba antiguamente con propósitos alimenticios y dietéticos. Actualmente, el lino europeo bio se cultiva sin abono químico, puesto que se recomienda su introducción en todas las dietas gracias a su riqueza en proteínas y omega 3: perfecto para reducir el colesterol. Sirve además para regular la función cardiovascular, algunas funciones digestivas, para perder peso y para mejorar el aspecto de la piel y el cabello.
En lo que concierne a la fibra, es bien sabido que es muy resistente a la fricción. Aunque se arrugue, no da de sí y tras los lavados se torna más suave, bonito y fuerte. No irrita la piel y no provoca reacciones alérgicas, algo que confiere en la ropa de cama ese tacto tan agradable.
Tiene una larga duración: las sábanas de lino se heredan durante generaciones sin romperse ni deformarse. El lino 100% no suelta pelusas, se ablanda con el uso y mejora su suavidad a medida que se va lavando. Es anti-alérgico, anti-bacteriano y aislante magnético. Incluso se utiliza para suturas quirúrgicas.
Y una curiosidad más: contiene lignina, sustancia que tiene la facultad de absorber los rayos UVA, así que protege la piel de los rayos nocivos del sol. Antes de la introducción del algodón en el siglo XIX, era el lino el material que se utilizaba para confeccionar la ropa interior, las camisas, las sábanas… de hecho, la palabra lino en inglés sigue utilizándose para referirse a la ropa de casa: home linen. Y lencería deriva de lienzo, que en su origen era una tela de lino. Este material aparece hasta en la escritura, ya que antes de que se inventara el papel, era este el soporte para transmitir conocimiento.
En el lenguaje de las flores lino significa “bienhechor”. La pequeña flor azulada de la planta del lino es delicada y se marchita muy pronto puesto que no dura más de un día. Presenciar la visión de un campo de lino en flor es un espectáculo. Para ello debemos desplazarnos a Bélgica -allí habitan los maestros lineros desde hace siglos- a Francia, Holanda y también Alemania y Austria. El área total dedicada al cultivo de lino para fibra está estimada en alrededor de 120.000 hectáreas en Europa y unas 320.000 hectáreas en el resto del mundo. Empleo lino 100% Europeo en todo nuestro catálogo precisamente porque está reconocido como el mejor del mundo, gracias a unas condiciones climáticas especialmente favorables que se dan en las latitudes templadas del norte con veranos húmedos y suaves que procuran una fibra fuerte, fina y sedosa con la que se fabrican los tejidos más exquisitos.
En Villalegría, los convertimos en tus sábanas, almohadones, manteles, pañuelos, bolsas de alianzas… en una fusión entre esta riqueza del lino y tu propia historia, que bordamos en él.